Se cambia de año...

Apenas faltan unos minutos para acabar el año. Y aquí estamos: preparándonos con ilusión para despedirlo, para dejar atrás tantos ratos en solitario o compartidos…

Lo cierto es que cada 31 de Diciembre, todos aprovechamos para dedicar un ratito a lo que ha sido el año para nosotros y, de repente, surgen tantas preguntas, tantas sonrisas, tantos suspiros…por todo aquello que no volverá a ocurrir.

Hacemos, como eso que dicen en las series extravagantes de la tele, una mirada al pasado. Un pasado que se nos escapa de las manos, que no volveremos a vivir por más que queramos. Pero ahora no vale de nada lamentarnos por aquello que no hicimos o en lo que fracasamos, ni llorar por los errores, ni avergonzarnos de lo que no fuimos capaces de decir. Ahora, es momento de APRENDER de nosotros mismos, de qué somos capaces y de qué carecemos.

Es difícil, quizás, al principio; pero año tras año son sumadas un mayor número de sonrisas y desaparecidos los quizás, los nunca o los pude y no lo intenté.

Aunque todos estaremos de acuerdo en que la parte más divertida de este parón de tiempo es imaginar todo aquello que nos deparará el nuevo año, aventurar planes a lo loco, ilusionarte porque empiezas de cero otro año y, por qué no, una nueva vida de la que el próximo 31 de Diciembre podrás estar más feliz de haber sido tú.

Así que a disfrutar de todo aquello que aún está por venir.

Feliz Año 2011