-FOLLAMIGOS-
Queridos follamigos de todo el planeta:
Tengo que confesaros que el otro día, volví a escuchar ese
comentario sobre vosotros; que os criticaban por pasar de estado líquido a solidificaros,
que vais jugando con otras moléculas por ahí, para daros a conocer por vuestros elementos.
Ni siquiera creo en la perífrasis de "Folla-amigo". Creo
que son necesarios los sufijos y los prefijos en las diferentes formas de
conjugar el verbo que acompaña a ese "amigo": "Yo follo, tú
follas, él/ella folla, nosotros follamos, vosotros folláis, ellos/as
follan".
Basta de batallas para luchar por terrenos que ya no son nuestros,
de dejar de lidiar con razas que se creen superiores o se creen con el derecho
de invadir nuestra intimidad y enviarnos a sumar parte de una reputación
sumergida en un índice de mortalidad mental.
El filósofo alemán, Friedrich Nietzsche, pensaba que "el sexo
es una trampa de la naturaleza para no extinguirse" y hasta Platón acabó
por descubrir que había un mundo de lo sensible y el mundo inteligible y que,
tú, querido amigo, nos ayudas a mantener nuestras necesidades básicas
equilibradas, justo como Maslow quería.
Puede que no haga falta hacer una regla de tres para descubrir que
a veces las raíces cuadradas no son exactas, que no se puede redondear o
truncar la personalidad de alguien porque no sea el decimal que tú querías.
Nadie puede negar que estamos contentos después de aspirar al cuadrado o al
cubo.Ya está bien de desprestigiar a los 69 y no darle el valor de que son casi
70.
De cualquier forma, ya se llame "hacer una cubana", un
"francés" o un "Spiderman", acabe con un "Ouuh
Yeah" o con muchos "Likes" para no llegar al "Sayonara
Baby" y al hecho de aceptar que el sexo es "un piacere".
Queridos follamigos, quería daros las gracias por correr durante
90 minutos, por querer arriesgaros a fallar o anotar un triple de vez en
cuando, por entender que también hay deportes de equipo en los que un rematador
tiene el mismo protagonismo que un líbero o un zaguero; por dejarnos respirar
cada tres brazadas y acabar la noche con agujetas de un "KO"
beneficioso para nuestras hormonas.
Al fin y al cabo, el sexo es equiparable a otra ciencia que nos
obliga a administrar nuestros bienes para conseguir lo que nos falta. Basta de
tanto sexo sumergido y tantos polvos "en B". Ojalá aquellos que pretendéis ser
una PYME, seáis capaces de olvidaros de tantos IVA's de juicios hipócritas a los
que no tenemos problemas para declarar cada céntimo a Hacienda o no querer
comprar un producto porque sí.
Ni la mejor Educación nos enseña que el sexo también es una
realidad y que no deberíamos tener que usar ninguna metáfora para ocultar de lo
que nuestra naturaleza, como seres humanos que somos, implica.
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