-(SUB) REALISMO-
Hoy encendería mi vida y la vería consumirse en un cenicero.
Resetearía y empezaría por el sistema binario dónde lloraba para comunicarme, casi como ahora.
Emplearía una máquina del tiempo para (re)-experimentar vivir, con todo lo que implica el verbo.
He robado tiempo, ilusiones, miedos y deseos a la gente que se me cruza. He ardido de placer y me he automordido de la rabia más rastrera y amarga que existe. He acabado haciendo monólogos con una guitarra o una almohada que me respondían con gritos mudos...
La ira de que los demás no vean lo que tú consideras bello, cruel o vergonzoso y las eternas dudas que quedan por quedarse entre esas nubes que nunca arrancan a llover, pero que estropean un bonito día.
La sinceridad juega al escondite en las relaciones y las redes sociales son la nueva forma de (des) comunicarse. La verdad acaba siendo una mentira para (auto) protegernos y la naturaleza ha dejado de ser natural para convertirse en fábrica, empresa o vivienda.
El amor es ahora descifrable dependiendo de tus intereses y, por supuesto, de las posesiones que tengamos a nuestro alcance. El miembro imprescindible de nuestra familia es la televisión ó los "likes" de la gente a la que ni siquiera les gustamos.
Y aunque estudiarse a sí mismo es el arte más difícil de está vida, tú seguirás siendo tú y yo seré otra persona...
Resetearía y empezaría por el sistema binario dónde lloraba para comunicarme, casi como ahora.
Emplearía una máquina del tiempo para (re)-experimentar vivir, con todo lo que implica el verbo.
He robado tiempo, ilusiones, miedos y deseos a la gente que se me cruza. He ardido de placer y me he automordido de la rabia más rastrera y amarga que existe. He acabado haciendo monólogos con una guitarra o una almohada que me respondían con gritos mudos...
La ira de que los demás no vean lo que tú consideras bello, cruel o vergonzoso y las eternas dudas que quedan por quedarse entre esas nubes que nunca arrancan a llover, pero que estropean un bonito día.
La sinceridad juega al escondite en las relaciones y las redes sociales son la nueva forma de (des) comunicarse. La verdad acaba siendo una mentira para (auto) protegernos y la naturaleza ha dejado de ser natural para convertirse en fábrica, empresa o vivienda.
El amor es ahora descifrable dependiendo de tus intereses y, por supuesto, de las posesiones que tengamos a nuestro alcance. El miembro imprescindible de nuestra familia es la televisión ó los "likes" de la gente a la que ni siquiera les gustamos.
Y aunque estudiarse a sí mismo es el arte más difícil de está vida, tú seguirás siendo tú y yo seré otra persona...
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